Por Leigh Thomas
París (Reuters) -El primer ministro Francois Bayrou tiene que convencer a los legisladores socialistas de la oposición en los próximos meses de tolerar su presentación presupuestaria de 44 mil millones de euros o enfrenta el riesgo de ser derribados.
Bayrou está llevando su presupuesto de 2026 a un parlamento fracturado donde las partes de la izquierda dura y la extrema derecha amenazan las mociones de no confianza en su contra a menos que haga revisiones importantes. Si puede convencer a los socialistas al menos para que se abstengan de respaldar tales mociones, el gobierno minoritario de Bayrou podría obtener el presupuesto, sin embargo, lo que significa que debe reescribir la legislación suficiente para que lo soporten.
Los políticos se dirigirán para las vacaciones de verano, con el Parlamento en el receso hasta el 22 de septiembre, dando a Bayrou dos meses para tratar de suavizar la resistencia de los socialistas a sus planes.
Propuesta de Bayrou
Bayrou tiene como objetivo reducir el déficit presupuestario de Francia, el más grande en la zona euro, desde el 5,4% hasta el límite del PIB del 3% de la Unión Europea para 2029. Su paquete de 43,8 mil millones de euros ($ 51 mil millones) congela la mayoría de los gastos no defensores y elimina dos días festivos.
Casi 21 mil millones de euros provienen de limitar el crecimiento del gasto social y local, sin ajustes de inflación para los salarios del sector público o los beneficios de bienestar. Otros 10 mil millones de euros apuntan a los altos ingresos a través de un impuesto “solidaridad”, restringe las exenciones de impuestos de los pensionistas y se repasa en el fraude.
¿Qué pasa después?
Si bien los políticos debaten el presupuesto durante sus vacaciones de verano, los sindicatos están considerando la huelga de huelga: el CGT de línea dura está a favor, mientras que el CFDT moderado no lo ha descartado. El regreso de septiembre del receso de verano promete ser particularmente tenso a medida que las partes se ponen en cuenta.
Bayrou debe finalizar su factura de presupuesto antes del 1 de octubre cuando se enviará a los legisladores. Sin la mayoría, es probable que en algún momento invoque el artículo 49.3 de la Constitución a adoptar el presupuesto sin voto, lo que provoca mociones inevitables sin confianza. Su supervivencia dependería de la abstención de los socialistas.
Demandas socialistas
Los socialistas exigen una revisión total del presupuesto, argumentando que el gasto congelan los trabajadores y pensionistas promedio de las cargas mientras tratan a los ricos con un toque ligero. Han criticado el aumento de impuestos de 4 mil millones de euros de Bayrou en los altos ganadores como muy insuficientes.
Bayrou ha señalado la voluntad de adaptarse, pero enfrenta limitaciones de aliados que piensan que la carga fiscal de Francia ya es excesiva.
Los socialistas también están en contra de los planes de no reemplazar a algunos trabajadores públicos retirados y el desguace de dos días festivos.